«Los Tambos de Arequipa», son lugares que en un inicio sirvieron para el comercio y como posada, ahora son monumentos históricos de la arquitectura de la Ciudad Blanca.


Si hay algo que caracteriza a Arequipa, es su amplia y diversa arquitectura, conservada y puesta en valor en las últimas décadas.

Un claro ejemplo son los tambos, ubicados al ingreso de la plaza principal de la Ciudad Blanca, a donde llegaban antiguamente los ganaderos con sus animales, desde distintos puntos de la ciudad.

El objetivo era vender ganado y otros productos, cubriendo largos caminos con la finalidad de llegar a los tambos, que servían como posadas. Aquí podían recibir alimentos y disponer de un lugar donde pasar la noche.

Los más bellos tambos se encuentran cruzando el puente Bolognesi, entre ellos detaca el tambo de «La Cabezona».

En 1991 fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación, considerando que la construcción más antigua del tambo data del siglo XVIII. A partir de su revaloración, se emprenden las iniciativas para poner en valor sus balcones, zaguanes, bóvedas, etc.

Tambo de Bronce

Este tambo, ubicado en el barrio de El Solar, fue construido en el siglo XVIII; el nombre lo adquiere durante la toma de Arequipa, en la guerra entre Perú y Chile.

El recinto se convirtió en un cuartel de artillería entre el 14 de septiembre al 24 de octubre de 1883.

La construcción original data del siglo XVIII y fue afectada seriamente por el terremoto del 23 de junio de 2001. Esta fue una de las principales razones para iniciar su restauración, como parte de la historia de la Ciudad Blanca.

Ahora es parte de uno de los atractivos arquitectónicos del Centro Histórico de la ciudad.

Tambo de Matadero

El tambo del Matadero le debe su nombre a que antiguamente este recinto albergaba un camal. Su construcción data de 1558, su arquitectura estaba inclinada a una estructura civil doméstica.

El tambo era conocido antes como La Barranca del Río y tenía también un fin comercial y de posada. Quizá sea el tambo más antiguo de la ciudad, y es de los más amplios.

La arquitectura inicial de este tambo era básicamente bóvedas que iban en paralelo con la calle Puente Bolognesi. El terremoto de 2001 también fue el punto más álgido en el abandono de este tambo. Sufrió daños en su estructura, como bóvedas, zaguanes, etc.

Los tres tambos restaurados forman parte de los monumentos históricos de la ciudad, y conservan su misticismo y esplendor, ejemplos de un gran trabajo de recuperación arquitectónica.